Estaba de 16 semanas de embarazo, aún no sabíamos si era niño o niña, pero cada noche teniamos nuestro momento...
Cuando cae la noche, llega nuestro momento. El momento en que me tumbo, me relajo. El momento en el que todo el ajetreo diario queda atrás.
Es entonces cuando pongo mis manos sobre mi vientre abultado, redondeado, el que alberga esa nueva vida que está en camino, TU.
Y te hablo. Y se que me sientes, que me oyes, que notas mis caricias llenas de amor a través de mi piel, llegando hasta ti. Y lo sé, porque me respondes. Te noto, te mueves, jugueteas, y me mandas señales. Quieres que esté tranquila, tu estás bien. Creciendo cada dia. Preparándote para el gran momento. El momento en el que nos encontraremos, en el que por fin, podré mirarte y admirarte. En el que podré colmarte de amor, de besos.
Cada noche tenemos nuestro momento especial, entre tu y yo. El momento mágico en que te siento dentro de mi. Algo inexplicable con palabras.
Amor incondicional, madre e hij@.
Es entonces cuando pongo mis manos sobre mi vientre abultado, redondeado, el que alberga esa nueva vida que está en camino, TU.
Y te hablo. Y se que me sientes, que me oyes, que notas mis caricias llenas de amor a través de mi piel, llegando hasta ti. Y lo sé, porque me respondes. Te noto, te mueves, jugueteas, y me mandas señales. Quieres que esté tranquila, tu estás bien. Creciendo cada dia. Preparándote para el gran momento. El momento en el que nos encontraremos, en el que por fin, podré mirarte y admirarte. En el que podré colmarte de amor, de besos.
Cada noche tenemos nuestro momento especial, entre tu y yo. El momento mágico en que te siento dentro de mi. Algo inexplicable con palabras.
Amor incondicional, madre e hij@.
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